Enorme repercusión y tristeza generó la noticia de ayer de la CADENA SER sobre los fallecidos durante el fin de semana en la Fonda Oriental de La Roda y la situación de muchos de sus residentes. La dedicación del equipo directivo y de los empleados no ha sido suficiente para “ponerle puertas al campo” y la triste realidad de muchas residencias de este bendito país se repitió en una de nuestro pueblo. Como dije ayer, mi más profunda solidaridad y comprensión con lo que están viviendo en esta residencia. Este hecho se está reproduciendo de manera trágica en muchos centros similares por toda España, no han fallado ellos, ha fallado el sistema.
Durante el día fuimos pasando de la tristeza, al cabreo y, a última hora de la tarde, a la indignación cuando leímos, no en un solo medio como creí inicialmente, sino en todos, que la Junta de Comunidades decía que ninguno de los fallecidos en la residencia la Fonda Oriental lo fue por el COVID- 19. Cuando salió la noticia estaba en otras cosas y, de repente, vi como mi móvil tomaba vida propia, se apagaba y se encendía, se movía para todos los lados ante la indignación de muchos rodenses que me mandaban la noticia con epítetos irreproducibles. Decir que ningún fallecido en esta residencia es por COVID-19, es un insulto a la inteligencia y una falta de respeto a los ciudadanos que vemos con sorpresa la cantidad de mentiras, sí, mentiras que nuestro gobierno regional está vertiendo sobre esta maldita crisis. Si nos mienten en esto, que se puede demostrar de manera tan clara, en cuántas cosas más no nos estarán mintiendo.
Mi reflexión es porqué, porqué una mentira tan burda e infantil ante algo que, nadie, ni ellos mismos, creen. El Gobierno de Emiliano García- Page está en esa fase de desesperación en la que entran algunas personas cuando lo ven todo perdido, y creen que sólo se salvan con una “huida hacia delante” y la huida, en este caso, pasa por mentir aunque uno no se crea sus propias falacias. Aplican la teoría del “ya que”, ya que he dicho que hay medios suficientes en el Hospital General de Albacete, aunque me hayan desautorizado los sindicatos sanitarios, “ya que” estoy presionando a los medios de comunicación, aunque algunos valientes lo estén denunciando en redes sociales, “ya que” he dicho todo esto, ¿cómo no voy a decir una mentira más?, pues así van. Una más, y otra más, y siguen, y siguen, y aquí nadie para, ni a base de caceroladas, este despropósito continuo.